domingo, 1 de febrero de 2009

GOMORRA - Roberto Saviano


Título: Gomorra
Autor: Roberto Saviano
(Nápoles, Italia, 1979)
Año de publicación: 2006
Título original: Gomorra
Edición: Debolsillo, cuarta edición, noviembre 2008
Traducción: Teresa Clavel y Francisco J. Ramos Mena
Páginas: 325, dos partes, 11 capítulos
-------------------------------------------------------------------------------------------------
EL LIBRO EN QUE SE BASA LA PELÍCULA DE MATTEO GARRONE, GANADORA DEL GRAND PRIX DE CANNES 2008

La Camorra napolitana, el Sistema, es una organización empresarial con ramificaciones por todo el planeta, incluyendo muchas ciudades españolas. Se ocupa de negocios muy diversos: desde la industria textil hasta el reciclaje de residuos, pasando por la droga o la especulación urbanística.
En este relato trepidante y revelador, que es literatura de la buena con una sólida base documental, Roberto Saviano reconstruye la lógica del poder y la expansión de los clanes originarios de Nápoles. El autor ha recibido amenazas de muerte y vive escondido bajo protección policial.

"Mucho se ha escrito sobre el otro Nápoles, pero pocas veces con tanta información y sensación de verdad." ABC
Concluyo la serie de artículos dedicados a obras documentales hablando de GOMORRA, de Roberto Saviano. Podría empezar diciendo que este libro me ha aportado todo lo que esperaba de él. Nos habla en extenso de la Camorra napolitana, de sus negocios y de sus actos. Nos habla de los capos, dando nombres y apellidos, y de los pequeños esbirros, dando nombres y apellidos. Nos habla de como funciona por dentro la organización criminal mas importante del mundo, más que la Cosa Nostra siciliana y las tríadas chinas. Podríamos referirnos a todo esto al comentar GOMORRA, pero la verdad es que nos quedaríamos cortos. Kilómetros cortos.
Este libro en realidad nos habla de como funciona el puto mundo.
Nos habla de los cimientos del capitalismo, de todo lo que ocurre ahí debajo para que el sistema funcione (aunque luego funcione como funciona, no hay más que ver los últimos acontecimientos). Es un libro que nos agarra de las solapas y nos sacude en la cara la verdad, que nunca tendrás éxito en la vida si acatas siempre la ley, si no estas dispuesto a robar, mentir, sobornar o descuartizar a tus rivales. Quítate la venda de los ojos, amigo, esto es la selva.
Varios pasajes de esta obra resultan muy gráficos en este sentido. Vemos que en la periferia de Nápoles existen talleres clandestinos que copian perfectamente, hilo a hilo, los patrones de las grandes marcas de moda. Vemos que la Camorra se encarga de distribuir esas tiendas por toda Europa, poniéndolas en venta a un precio infinitesimal con respecto a las autenticas. Pero vemos también que esas mismas grandes marcas apenas se quejan porque juegan al mismo juego. Encargan a esos mismos talleres clandestinos la confección de las piezas que se van a vender en las boutiques de Paris o Nueva York. Si no lo hicieran así subirían los costes y los productos no serian competitivos. Por supuesto no hemos mencionado que los trabajadores de esos talleres de los alrededores de Nápoles, no de Kuala Lumpur ni de Islamabad, de Nápoles, carecen de todo tipo de derechos laborales y no cotizan a la Seguridad Social. La misma mierda de siempre.
Y es que este libro, si hubiera sido de ficción, sería uno de los más terroríficos del género ese de la antiutopía, ya que nos presenta un mundo asfixiante donde todo está controlado por poderes en las sombras y donde el individuo no es más que un peón de una gigantesca partida de ajedrez que juega contra sí mismo.
Pero no es ficción.
Esos primeros capítulos, aunque no se hable tanto de la Camorra en sí, me parecen los mejores aunque también los mas terribles. Luego el autor cumple con lo que se espera de él y nos habla de las matanzas de Secondigliano, de las carreras de los grandes capos y de cómo un puñado de ellos transformaron un lucrativo negocio basado exclusivamente en el narcotráfico y en la extorsión a nivel más o menos local en una de las más importantes multinacionales del mundo. Incluso dedica algún capítulo a aspectos accesorios de la historia de la mafia napolitana, como es el papel de las mujeres en los clanes y la obsesión de los camorristas por querer vivir dentro de una película de Hollywood. También inserta un capítulo genial que no le habrá pasado por alto a nadie en el que habla de Kaláshnikov, el general soviético, y de su obra, el mundialmente famoso AK-47. Todos estos añadidos nos ayudan a dibujar la realidad del Mediodía italiano desde distintos ángulos. Pero la semilla del miedo ya nos la ha plantado dentro. Ellos están aquí, entre nosotros. Y no se dedican a observarnos sino que nos dictan todos nuestros actos, desde qué debemos comprar hasta a quién debemos votar. Roberto Saviano sabe y ahora yo también sé.
Bien sé que lo que afirmo es un tanto exagerado. Como sea, vivir en Madrid no es como vivir en la Campania. Los jóvenes de los barrios deprimidos de mi ciudad no tienen que escoger necesariamente entre ser víctima o víctima-verdugo, pero los tentáculos del Sistema ya alcanzan nuestro mundo, ya se infiltran en nuestra sociedad. Quién sabe a dónde llegarán en un futuro.
En este caso, y lo menciono porque ya lo hice en los artículos anteriores, no hay documentación gráfica. No hace falta. Si queremos confirmar que el arresto de Cosimo di Lauro es tal y como se nos narra en el libro no tenemos más que acceder a Google Imágenes y allí lo tendremos, con su coleta lustrosa, su abrigo de tres cuartos y su mirada chulesca, rodeado de carabineros. Todo lo podemos encontrar porque todo lo que nos cuenta Saviano es la realidad que le ha tocado vivir día a día.
Lo mires como lo mires este es un libro extraordinario, aunque defraudará al que se espere un capítulo de "Los Soprano". Aquí nada ni nadie es entrañable. Todo es cruel.
Aún no he tenido la oportunidad de ver la película homónima pero sí me han dicho que para que esa experiencia sea completa conviene haberse leído primero el libro. Ok. Requisito cumplido.
No creo necesario meterme con la estructura de la obra. Todo está como debe estar para que el lector vea las cosas que ha visto el autor, que de eso se trata.
Así pues no me alargaré más y concluiré diciendo que esta ha sido una de las lecturas más sobrecogedoras que he conocido. Ni Stephen King ni hostias.
PUNTUACIÓN: 93 sobre 100.

No hay comentarios:

Búsqueda personalizada